Cada vez quedan menos rastros de vos en este mundo material, pero en mi corazón seguís tan presente como en esas noches interminables de televisión y comentarios oportunamente graciosos o profundamente reflexivos.
Cuando te pienso lo primero que inunda mi alma es esa sensación que sentía cuando me tirabas, como diciendo algo obvio, o como quién no quiere la cosa, una verdadera revelación, una verdad del universo. Nunca nadie me generó eso nunca más. Una de las cosas que más tristeza me da de que nunca lograras salir de tu capullo es que nunca voy a poder tener la certeza de si esas verdades eran tales ¿sería sólo una impresión mía, resultado de nuestra extraña e intermitente pero profunda relación, o sería una realidad? No lo sé.
Lo que sí sé es que la humanidad perdió con tu partida. Todos los que te conocieron de verdad se quedaron con la misma sensación, pero también puede ser porque mal que mal todos te admiraban de alguna manera, o te querían ¿un amor capaz de distorsionar la visión propia? Todo son dudas. Todo son dudas y mucho dolor. Pero es un todo allá abajo. Ese abajo insignificante, totalmente tapado y abrumado por el amor. Creo que esa es la reflexión que se podría sacar de todo esto.
Consecuentemente, con tu muerte nos dejaste tu última verdad absoluta, que lleva años y litros de lágrimas depurar, y es infinita en matices: solo el amor es lo que sobrevive a la muerte.
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4 comentarios:
Una pena no haber conocido a Pelo.
Te amo
cuando se quiere mucho a alguien que vivio la muerte de alguien muy cercano, generalmente no se toca el tema, como si de esa manera se ayudara a no recordar, como si existiera la posibilidad de olvidar.
que no sienta la necesidad de hacer eso con Pelo, habla de que me trasmitis su presencia en vos de una forma positiva, no se transformo en una conversacion incomoda, inexistente o forzada.
Eso me parece un mimito para el y naturaliza su presencia para todos los que la miramos muy de afuera.
te quiero y besitos
Grosa Mechi.
Grosas Dani y Mechi.
Totalmente de acuerdo, Mechi, yo hablo de él sin problemas. Olvidar no es sólo algo imposible, si no indeseado.
De todas formas vos me conocés a mi y a mi hermano, lo que de cierta manera te hace haber conocido a Pelo, que se incorporó en nosotros; se vé que a algún lado van esos supuestos 21 gramos.
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